12 de diciembre

La ternura de Dios

"Como un padre tiene compasión de sus hijos, así el Señor tiene compasión de los que le temen."

— Salmo 103, 13

Padre celestial,

Tu ternura es infinita. Te acercas, consuelas, tranquilizas. Nos dices que no tengamos miedo.

Gracias por esta ternura divina. Por esta presencia que consuela, que tranquiliza, que nos envuelve en amor.

Que pueda acoger esta ternura. Dejarme consolar, tranquilizar, amar como un hijo por su padre. Nunca estoy solo.

Amén.

Reflexión

¿De qué tienes miedo? ¿Cómo puedes acoger la ternura de Dios?

Por todos los que tienen miedo y necesitan consuelo.

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